lunes, 20 de octubre de 2008


Pensé que la vida es diferente, que la misión de uno era sonreír y ser feliz, que la palabra dolor no existía y que las lágrimas solo eran de ese cuento que mamá me contaba y que el amor era verdadero.
Pensé que los problemas no eran problemas, sino algo pasajero; como perder una muñeca, así lo recordaba yo.
Pero los años, mis años pasan, y empecé a ver que mi mundo no era el deseado, que los problemas ya no era perder una muñeca y que las lagrimas no solo salían de tanto reír.
Veía como las cosas cambiaban y que papá y mamá ya no eran los mismos, sino que las peleas abordaban día a día y yo sin rumbo, sin saber para donde ir, los miraba y solo brotaban lágrimas y de mi boca salía un ¡Basta!
Ahora, con un camino ya recorrido, donde atravesé miles de tormentas, me di cuenta que todo no es lo que parece, que cada etapa que Dios te regala es un aprovechamiento mas, donde el tiempo de reír esta así como el tiempo de llorar; donde el mundo de mentiritas existe y la realidad que lastima también.
Solo que… hay veces que no sabes para donde disparar, y aunque quieras hacer borrón y cuenta nueva, sabes perfectamente que son hojas en blanco arriba de las que lastiman y que ahí van a estar y por más que hallas vivido más de lo que tenias en cuenta, algún día mientras estés sentada en el borde de tu cama y quieras llorar y no puedas y sentís una presión fuerte en el pecho y una carga enorme en la espalda, ahí, ahí es cuando ese borrón y cuenta nueva quiere salir de vos, manifestado de la forma que sea, pero necesita ser olvidado para que tu camino, sea un campo lleno de cosechas donde vos decidas quien entra y quien no.
Son solo momentos, palabras y sentimientos donde marcan tu vida y hacen de tu estado algo mejor o peor, y tal vez como yo, soñaste una vida de colores, pero sabe que el negro también es un color y que no todo pinta lo que parece y que las sonrisas no solo son de papel y las lagrimas no salen de tanto reír.
Si, las sonrisas son verdaderas y las lagrimas muchas veces son gotitas de dolor que adentro no servirían.
La vida es un regalo, que queda en uno abrir el paquete y descubrir lo que nos toca, o quedarse con el miedo de saber lo que realmente la vida es.


Ludmila Torres.
22/09/08
12:10 PM

No hay comentarios:

Publicar un comentario